De un modo inexplicable. Cuentos cortos fantásticos


De un modo inexplicable

Autor: Marvin Valladares Drago

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Cuento publicado el 13 de Marzo de 2007


Todos en la estación sabían de algún modo inexplicable que era la última vez que miraban a Javier. Es decir, la última vez que estaban frente al cuerpo rebosante de vida de Javier, la última vez que carne y alma fundianse en un solo latido para conformar ese maravilloso ser que ahora partía al encuentro de su hado. Por que él podría regresar, claro está, pero ya no sería él mismo Javier, no; nunca, solo parte de él, mas bien su cuerpo inanimado, quizá solo sus huesos inútiles, tal vez su carne putrefacta, sus cenizas, podría inclusive regresar intacto, pero ya sin el aliento de vida. O sea muerto. Su otra mitad andaría quien sabe donde, buscando asidero en otra dimensión, en otro cuerpo, en otro ser.
Todos en la estación sabían de algún modo inexplicable que era la última vez que miraban a Javier. Es decir, la última vez que estaban frente al cuerpo rebosante de vida de Javier, la última vez que carne y alma fundianse en un solo latido para conformar ese maravilloso ser que ahora partía al encuentro de su hado. Por que él podría regresar, claro está, pero ya no sería él mismo Javier, no; nunca, solo parte de él, mas bien su cuerpo inanimado, quizá solo sus huesos inútiles, tal vez su carne putrefacta, sus cenizas, podría inclusive regresar intacto, pero ya sin el aliento de vida. O sea muerto. Su otra mitad andaría quien sabe donde, buscando asidero en otra dimensión, en otro cuerpo, en otro ser.

Entre sollozos y frases entrecortadas la desconsolada madre se derrumbó sobre el pecho del viajero. A último momento fue necesaria la intervención enérgica y autoritaria del padre, para arrancarla de los brazos del vástago que partía quizá para siempre.
El resto de la familia: hermanos, tíos y abuelos se acercaron a estrechar la mano del desventurado, sin verlo a los ojos naturalmente, como si temieran revelar con una sola mirada su destino fatídico.
Cuando el autobús desapareció tras los cerros, la familia regresó a la villa en silencio absoluto. Apenas los sollozos de la madre interrumpían de cuando en cuando la quietud lapidaria del viaje.
Una vez en casa todos retornaron a sus actividades rutinarias. Después de la horripilante cena, (puede leerse escena si se quiere), todos se retiraron a sus habitaciones. Nadie, absolutamente nadie hizo alusión al tema: o sea, a lo que de algún modo inexplicable, sabían de Javier.

//alex


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Últimos comentarios sobre este cuento

Fecha: 2007-11-05 16:13:14
Nombre: LILY
Comentario: esta muy corto la verdad eske a mi m gustan los cuentos de todo tipo pero largos a mi me encanta hacer cuentos de los que sean estoy haciendo un libro de varios cuentos infantiles y cuando lo termine planeo hacer un libro de cuentos policiacos pero ahorita no le he podido avanzar por tanta tarea de la escuela yo apenas tengo 12 años