El otro día hace mucho tiempo estaba en unas montañas altas impresionantemente altas, la cima se encontraba llena de nieve y una media neblina blanca, que aun, alcanzaba dejarme ver esas montañas tan impresionantes, y más aún el suelo también con mucha nieve, yo respiraba y sentía frío en mi nariz y en el aire que respiraba, pero ante todo estar ahí en ese lugar impresionante me causaba algo desconocido, como tranquilidad una gran tranquilidad y desahogo de sentimientos inolvidables, indescriptibles no se cuánto tiempo estuve ahí, lo único que sé, es que el tiempo era estático ahí solo existía el momento, la impresión, la visión, cuando desperté sentí la sensación que era quizás yo en el vientre de mi madre, eso pensé., pero cuando soñé y creí que era el vientre de mi madre realmente en ese momento es cuando yo desperté.
//alex
Círculo
Autor: Silvia Liliana Arteaga Esparza
(4.3/5)
(916 puntos / 213 votos)
Cuento publicado el 28 de Marzo de 2014
Otros cuentos fantásticos que seguro que te gustan:
- La ventana rota
- Pipilinita
- Luz y Oscuridad
- El loco y el espantapájaros
- Un Alma en Pena
¿Te ha gustado este cuento? Deja tu comentario más abajo
(Nota: Para poder dejar tu comentario debes estar registrado.Todavía no lo estás? Hazlo en un minuto aquí)
Últimos comentarios sobre este cuento
Fecha: 2015-08-19 05:54:03
Nombre: RconR
Comentario: No pos muy surrealista