Las flores celestes. Cuentos cortos fantásticos


Las flores celestes

Autor: Heydi

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Cuento publicado el 05 de Marzo de 2008


En nuestro mundo, Satanás es el más malvado de todos pues tal parece que
no sabe amar y que disfruta haciendo trampas para que los ingenuos humanos
caigamos.
Sin embargo, recientes investigaciones muestran que el diablo vivió y
padeció penas de amor muy profundas y que marcaron su vida para siempre.


El Dr. Tatoratotí nos cuenta que en un bosque cerca de Sayausí existía un
hermoso campo de flores celestes y un aroma exquisito, quizá el más bello
y delicioso de entre las plantas, que rodeaban un pequeño, casi diminuto
hoyo con agua rosada que burbujeaba como los fuegos artificiales en el
cielo. En ese hoyo vivía un pez arco iris muy agraciado que daba aún más
misterio a ese lugar ya que pasaban 10, 20, 100, mil años y no moría,
tampoco envejecía. Este campo de flores estaba en medio de un bosque
demasiado tupido y apretado que los nativos no podían atravesarlo, siempre
fracasaban en su intento. La gente pueblerina dice que a través de los
árboles sobresalía una luz tan brillante y hermosa que les asustaba, era
tan intrigante esa luz que hasta el mismo demonio se vio tentado a
investigar y después de meses, trampas y sufrimiento logró atravesar el
bosque. Lo que vio le conmovió tanto que estaba dispuesto a renunciar al
infierno y ganarse el cielo.

Atravesó el campo de flores celestes y vio que el hoyo crecía y crecía
hasta convertirse en una laguna de espuma de colores y vio salir del
solitario pez una criatura demasiado divina que no tuvo más opción que
hacer una oración y agradecer, aquella doncella lo cautivó. Intentó
alcanzar unas pequeñas flores pero se arrepintió, pensó que eran muy poca
cosa para ella así que se le acercó y por primera vez tuvo miedo, en aquel
rostro dorado encontró unos ojos azules tan profundos que ni el mismo cielo

los igualaría, pero esos ojos estaban llenos de lluvia, veían con tristeza
y reproche y Satanás intentó alegrarla pero no pudo, así que se puso a
llorar con ella, tanto lloró que por poco pierde su rabo y su pelo pero se
calmó cuando vio una sonrisa de arco iris en su rostro y el cielo bailó,
cantó y gozó. Satanás quedó tan enamorado de ella que le ofreció el
mundo, el sol, el viento, los diamantes y hasta la propia luz encerrada en
una botella de cristal, pero ninguno de estos objetos agradaron a la
doncella, lo único que hacían era ofenderla más. Satanás quería
escuchar su voz pero ella nunca habló, y nunca más volvió a sonreír para
él. Tres años Satanás intentó conquistarla, a las buenas, a las malas,
con llanto, con sonrisas, con enojos y serenos, nada, nada funcionaba.
Pensó que quizá no lo quería porque él era Satanás y era malo, horrible
y apestoso. Decidido a conquistarla se bañó, se compró un traje de gala,
se hizo la barba y el pelo y hasta dejó de reclutar almas al infierno pero
nada consiguió. Había podido resolver tantos crucigramas pero no pudo
encontrar respuesta para este que quería resolver con todo su corazón. Se
dio cuenta que su lucha estaba perdida, ya ni orar a Dios serviría, ya ni
regresar al infierno valdría. El último día antes de su renuncia fue a
despedirse de la doncella que ya no era doncella sino pez, pero ya no estaba
sola, tras de sí un millón de pececitos nadaban, la doncella sabía que
pronto desaparecería y que su hija, la única sobreviviente, mantendría
la tradición de la laguna seca, la magia y el hechizo.

El diablo se enfureció tanto al no haber conseguido su propósito que
quemó el bosque, las flores, y la laguna también pues a medida que
avanzaba el fuego el agua se iba consumiendo hasta evaporarse. La doncella
desapareció y la pececita sobrevivió debajo de la tierra, en un pozo
subterráneo. Pero algo curioso pasó, las flores no sufrieron ningún
daño, Satanás no lo notó y se juró a sí mismo jamás enamorarse y ser
más malo.

Con el tiempo, el mundo se ha convertido en lo que es hoy, pero Satanás
sigue ignorando que lo único que hubiese conquistado a la doncella era una
flor celeste de aquellas. Satanás por demostrar su poder despreció las
cosas más sencillas. ¡Qué ironía! Se le dio a Satanás la oportunidad de
ser un héroe y la perdió por olvidarse de las cosas simples de la vida.

//alex


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Últimos comentarios sobre este cuento

Fecha: 2009-07-30 13:43:17
Nombre: Larry Clauberg
Comentario: Muy interesante el abordaje sobre la religiosidad.


Fecha: 2008-10-27 15:18:14
Nombre: male
Comentario: es ermoso leeanlo... es muy lindo...
yo...
male...
besos...
chau...


Fecha: 2008-10-27 15:14:43
Nombre: male
Comentario: es ermoso leeanlo... es muy lindo...



yo...
male...


Fecha: 2008-09-19 11:02:04
Nombre: Larry Clauberg
Comentario: El cuento es interesante y, por supuesto, nos indica que las cosas simple de la vida, siempre son las mejores.


Fecha: 2008-08-01 16:11:13
Nombre: jair
Comentario: estuvo muy bonito si pueden mandarme uno porfevor se los agradesco


Fecha: 2008-07-09 19:55:50
Nombre: Rocio
Comentario: buen tratado de la historia



Fecha: 2008-06-29 20:17:50
Nombre: johana
Comentario: es my lindo me gusta


Fecha: 2008-06-12 19:52:20
Nombre: jaime
Comentario: muy buen cuento me gusto mucho


Fecha: 2008-06-04 18:29:01
Nombre: paula
Comentario: me gusto